Ya estamos de vuelta y con las pilas cargadas!
Tenía pendiente explicar-os nuestra salida al museo en familia. Uno de estos últimos domingos nos apetecía acercarnos a visitar varias exposiciones en el CCCB y el MACBA en Barcelona.
Cuando nació nuestra pequeña decidimos no dejar de hacer cosas sino todo lo contrario, motivarla y acostumbrarla a aquellos lugares que podrían ser aburridos para los niños, la verdad nos salió bien, ella se amolda a todo lo que le rodea y siempre es feliz, buscando la parte divertida y creativa de las cosas en todo lo que ve.
Esta vez con dos peques a cuestas nos embarcamos en la aventura, además hace unos días leí el post de Madrid Martina & Myself sobre trucos para visitar museos con niños.
Tengo que ser sincera, la verdad no os podría describir la exposición que vimos, pero recuerdo perfectamente la increíble rampa blanca que recorre todo el edificio de arriba a abajo, la cortina metálica que nos anunciaba la entrada a la sala, el suelo de paves y sobretodo la tienda.
Mis hijos vieron los millones de libros y empezaron a revolotear como si no encontrásemos en la biblioteca del barrio. Miraron, tocaron, bailaron, corrieron y rieron a carcajadas uno detrás del otro. Como os podéis imaginar con un niño de un año, yo y el papi de las criaturas también hicimos un maratón. Eso sí, ellos estaban felices.
Entre exposición y exposición hicimos un alto en el camino, cerca de allí se encuentra el Antiguo Hospital de la Santa Creu visita obligatoria si os visitáis Barcelona. Se trata de las antiguas dependencias de lo que fue el gran hospital de Barcelona hoy sede de la biblioteca de Cataluña.
Repetiremos seguro!!!